Ya llueve. Pienso que era raro que tardara tanto en hacerlo, que después de semana y mucho ya tocaba. Miro por la ventana. No está demasiado oscuro pero las gotas salpican todo el paisaje. Parece que se divierten. Sigo mirando. Las gotas resvalan por la ventana y entonces, coño, pienso, ¡yo conozco esa gota! Sí, no hay duda de que la he visto en alguna parte. No estoy segura de si estaba en tu chaqueta o si colgaba de tu pelo el día más feliz de mi vida. Al igual que yo se quedo colgando de tí hasta que se estrelló. Vuelvo a mirarla para ver como se choca por fín contra el final de la ventana. Al menos no soy la única que no ha dejado de estrellarse contra todo desde que te conoció. No soy la única que aun no ha podido superarlo.
Quedan 13 días y 462 noches.
Me encanta
ResponderEliminar